EL GUARDIÁNFranz Kafka
Corriendo superé al primer guardián. Entonces me sentí aterrorizado, corrí de regreso y le dije: —Pasé por aquí corriendo mientras tú estabas mirando hacia el otro lado. —El guardián tenía la mirada clavada hacia adelante y nada respondió—. Supongo que verdaderamente no debería haberlo hecho —le dije. El guardián siguió sin hablar—. ¿Significa tu silencio permiso para pasar...?
aH!!! Qué tierno… inocente… y tonto. Quizá no es lo suficientemente importante para obstruirle el paso… (aa mis comentarios van de mal en peor… lástima… lástima [dan])
ResponderEliminarSaludos