Era la más solicitada en aquel pabellón. Reía mucho y no dejaba a nadie sin atención especial. Como vestía de blanco y tenía intimidad con los médicos, ningún paciente percibió que era apenas una más entre los internos de la unidad psiquiátrica.
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Espectacular cuento. Una maravilla.
ResponderEliminarGracias Esteban!
ResponderEliminarGracias Sergio, por mais um trabalho!