Fue una mañana aciaga. Me quedé sin Internet cuando debía
ratificar un pasaje aéreo o lo perdía; cortaron la luz y se cayó la línea
telefónica, por lo que tuve que bajar quince pisos antes de enterarme que el apagón
era general. Para colmo de males, al llegar a la plata baja encontré la novedad
de que habían entrado ladrones al edificio y tras asesinar al encargado andaban por los pisos saqueando todos los departamentos. Una situación kafkiana, pensé en
algún momento. Y solo existe una persona en el universo que entiende de esto.
—Dígame, Franz, ¿cómo se sale de una situación kafkiana?
El escritor me miró con esa mezcla de desconcierto y susto,
tan propia de él, y respondió con lágrimas en los ojos.
—Quisiera ayudarlo, joven, pero me resulta imposible; yo
nunca resolví ninguna de las situaciones que planteé en mis ficciones.Acerca del autor:
Sergio Gaut vel Hartman
1 comentario:
¡Muy bueno, me encantó!
Publicar un comentario