miércoles, 31 de octubre de 2012

Los extranjeros - Nicolás Ferraiolo


Dos extranjeros iban por Villa Lugano buscando el centro de Buenos Aires. "Al final no es tan parisino...", dijo uno. Con cámaras en mano buscaban la Casa Rosada; mientras, por hacer algo, sacaban fotos a la entrada de La Oculta. Quisieron preguntarles a unos muchachos de anchas ropas y espaldas, y estos, cordialmente, los invitaron a dar las cámaras. Que para entrar tienen que pagar comisión. Que para volver atrás también, que (acá fueron buenos) si no pagan algo puede pasarles, que "ésta" dice que paguen (ojo, mostrando un arma). Meursault se encogió de hombros, Camus lo miró, volvió la vista a sus interlocutores y dijo: "me tiene sin cuidado". Los muchachos se miraron y no entendieron bien el porqué de esa frase. Por las dudas los mataron. Y sus cuerpos inertes quedaron tirados en la puerta de La Oculta. Los transeúntes pasan. Indiferentes.

Sobre el autor: Nicolás Ferraiolo

7 comentarios:

fernando andrés puga dijo...

Ojo con mostrar esto a los turistas. Me resulta algo racista este relato.
¿Qué opinan?

El Titán dijo...

No, a mí no. Es border. Pero creo que tiene un sentido del humor especial.

Javier López dijo...

A mí me parece un buen relato, solo eso.

Sergio Gaut vel Hartman dijo...

No me pareció racista, ni humorístico, ni especialmente bueno. Pero no importa. Hoy estoy en un día en el que nada de lo que lea me va a gustar. Lo leo mañana de nuevo y vemos.

Anónimo dijo...

Fernando, qué tal. No creo que la raza turista que haya leído El Extranjero de Camus se ofenda. El cuento toma humorísticamente como excusa primaria aquella nouvelle, y el desarrollo siempre tiene esa base.

Anónimo dijo...

Algo para aclarar: el plural no habla de una especie, sino que incluye a Camus en ser Extranjero Indiferente como su personaje Mersault, en la nouvelle ya dicha. El cuento puede ser bueno o malo, efectivo o snob, ese es otro cantar. Ahora sí. Saludos.

Sergio Gaut vel Hartman dijo...

Nicolás. No hay nada que aclarar. Que el cuento se defienda solo. Hoy lo leí con otros ojos y me pareció racista, muy divertido y bien escrito. Pero tuve que devolver los ojos que me habían prestado y es casi seguro que mañana me va a parecer otra cosa, dependiendo de los ojos que use para leerlo.