OBRA DIVINA (VARIACIÓN IX)
Eduardo Gallego & Guillem Sánchez
El presidente del Tribunal de Ingeniería Técnica Cosmológica contempló al opositor con cara de pocos amigos.
—Escuche, señor Huitzilopochtli. Por mucho que insista, no podemos admitir la necesidad de corazones humanos palpitantes para su ejercicio práctico de génesis de universos.
—Debo ser aplacado para que el cosmos siga su curso. No en vano desmembré a mi hermana Coyolxauhqui y arrojé su cabeza al cielo para crear la luna. Además, maté a mis 400 hermanos y...
—¡Que no, caramba! Si quiere calmarse, pida una tila. Por favor, cíñase usted a los procedimientos especificados en el Boletín Oficial. ¡Deje de mirarme el pecho y guarde ya ese cuchillo de obsidiana, que me está poniendo nervioso, leñe!
Eduardo Gallego & Guillem Sánchez
El presidente del Tribunal de Ingeniería Técnica Cosmológica contempló al opositor con cara de pocos amigos.
—Escuche, señor Huitzilopochtli. Por mucho que insista, no podemos admitir la necesidad de corazones humanos palpitantes para su ejercicio práctico de génesis de universos.
—Debo ser aplacado para que el cosmos siga su curso. No en vano desmembré a mi hermana Coyolxauhqui y arrojé su cabeza al cielo para crear la luna. Además, maté a mis 400 hermanos y...
—¡Que no, caramba! Si quiere calmarse, pida una tila. Por favor, cíñase usted a los procedimientos especificados en el Boletín Oficial. ¡Deje de mirarme el pecho y guarde ya ese cuchillo de obsidiana, que me está poniendo nervioso, leñe!
2 comentarios:
Me gustó!
Pato.
mmmmm a mí no tanto. Creo que los miembros del Tribunal de Ingeniería Técnica Cosmológica eran del país colonizador...
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