lunes, 4 de agosto de 2008

Cartas desde Umbrías - Erika Mergruen


CARTAS DESDE UMBRÍAS
Erika Mergruen

Al norte, sobre un montículo de ostras, se eleva el congal de Umbrías. Sus paredes son gruesas, como trozos de murallas antiguas. Al caer la noche tras sus ventanas guiñan luces verdes. Las paredes se cimbran con la música.
Y se cimbran las conciencias de los persignados de Umbrías. Bajo la noche sin estrellas, padresnuestros y cumbias fornican. Ondulan al norte los senos de las putas; al sur, las sotanas de los cuervos.
A medianoche, del montículo escurren pulpos, percebes y sardinas. En el congal todo es nota metálica y sudor. Y si alguien abre las puertas del tugurio, una gran marejada se vuelca a las calles para destapar a los sepultos y sepultar a los que rechinan los dientes en las cuentas del rosario.

1 comentario:

Nanim Rekacz dijo...

Urbes... todas Umbrías...