—Buenos días. Vengo porque la hija de la vecina de mi madre se enteró que estoy desempleado, y ésta se lo comentó a su marido. Su marido le dijo que un amigo suyo había oído en el barrio que estaban contratando a gente en su empresa. En principio no le dio importancia, pero lo contrastó en la peluquería y se lo corroboraron. La hija de la vecina de mi madre se lo dijo a su madre y ella se lo dijo a la mía, por eso estoy aquí.
—Sí, tenemos un puesto vacante de investigador privado. Dígale a la hija de la vecina de su madre que se pase por aquí.
Tomado de http://oscarroman.com/
2 comentarios:
Ya lo leí y comenté en su blog, pero no por ello dejaré de hacerlo aquí. Un muy buen cuento de Óscar. Y el trabajo, para quien se lo merece.
Un saludo.
Yo también lo cnocía Oscar, lo bueno se promociona. Me encantó, felicidades.
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