No dramaticemos, Edipo. Lo que pasó, pasó. En el mundo de la sangre, siempre hay puertas de escape. Fui tuya. Sí. Besaste el óxido de mis palabras y gozaste con ellas, en silencio, cuando aún tenías ojos para comprender que mi cuerpo te necesitaba, y se enroscaba en ti con el placer que sólo da la ignorancia.
Yo era una soga al cuello, bien firme; un amor anudado. Y tú, una historia ciega y solitaria que mis lágrimas recogieron para devorarla.
Soy tuya. Aún. Mis huesos te reclaman; la unión posible en esta cárcel de tierra.
Tomado de: http://lilielphick.wordpress.com/
4 comentarios:
Genial, Lilian. Genial.
Gracias por reproducir "Yocasta" en QI.
pd: Un detalle. Mi apellido es sin H: Elphick.
Abrazos,
Lilian.
Gracias por llamarnos la atención sobre la gaffe. Seguramente la cometí al transcribir el título. Conservé las letras pero en un orden extraño. De todas formas, en la etiqueta estaba bien. En cuanto a subirlo al blog, las gracias las doy yo en nombre de todos...
El cuento se excedió.
Ya estaba perfecto al finalizar con ..".lo que pasó,pasó...
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