El escritor se toma su tiempo, reflexiona frente al papel en blanco y detenidamente empieza a escribir sobre un personaje con la capacidad de predecir el futuro a través de certeras visiones. Una de ellas trata de un vidente que pierde la memoria y que para recuperarla se dedica irremediablemente a la literatura. De repente, el escritor suelta el bolígrafo alterado y, casi de inmediato, recuerda.
Ilustración de Macías.
1 comentario:
Bravo Esteban! Amo la circularidad!
Saludos!
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