domingo, 14 de septiembre de 2008

El mago - Jorge Martín


EL MAGO
Jorge Martín

A Drake le costaba muy poco, ante una amenaza, hacer que en su mano apareciera un arma y colocarla en la frente del agresor para que sintiera el frío del metal. Su fuerte sugestión podía hacer brotar lo que le viniera en ganas. Había espantando más de una amenaza con este truco. Sólo una vez había llevado al extremo el espejismo y había disparado con su mano vacía; el ladrón cayó fulminado. Claro que la policía no determinó otra cosa que causas naturales, pero él podía ver el agujero que su bala irreal había dejado en la frente del atacante y un hilo de sangre fluyendo constante hasta un charco rojo oscuro y húmedo de la sangre. Esos ojos entrecerrados y secos de vida le dejaron una huella indeleble. Ahora sólo hace surgir conejos de la galera y pañuelos de sus bolsillos. 

Ilustración: M.C.Escher (Periodo Italiano 1922-1935)

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