Los grandes almacenes Herregud contrataron a un grupo de titiriteros para trabajar en su centro de control.
Su tarea consiste en observar desde los monitores de circuito cerrado a los clientes más indecisos.
Ahora son ellos quienes los dirigen, mediante hilos invisibles, hacia las distintas secciones y productos, para que realicen sus compras.
3 comentarios:
El secreto de una buena publicidad...
muy bueno Javier...
Ah, las delicias de la sociedad de consumo. Hace un par de días que un hilo suelto me hace cosquillas en la espalda...
Gracias Esteban!
Sergio, eso que sientes es que cortaste los hilos hace tiempo, pero quedó algún fleco. Nada de importancia, con los hilos cortados, ya no hay quien nos maneje...
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