Los tigres de la noche imaginan tantas cosas. Construyen historias increíbles, saborean palabras, desgarran metáforas. La selva los proteje de los cazadores que disparan tinta en blancos papeles. Y en la oscuridad lamen su nostalgia de ser, hasta despedirse en la rebeldía del viento.
¿Cuándo te veré otra vez?
Cuando no dejemos huella.
Crujen las ramas. Dos venados huyen ante los haces de luz y la metralla constante de realidades.
Tomado de: http://lilielphick.blogspot.com
1 comentario:
¡cuánta sangre derramada !
¡ Cuántos árboles talados!
¡patética...!
Publicar un comentario