REACCIÓN TARDÍA
Gareth D. Jones
En su estado latente le llevó mucho tiempo a la descomunal criatura biolítica reaccionar. Tras innumerables siglos los impulsos nerviosos finalmente alcanzaron su cerebro petrificado y transmitieron el terrible mensaje: su nariz había sido completamente arrancada.
Entrando súbitamente en un estado de completa vigilia, se alzó sobre sus patas con un aullido agónico que pudo oírse desde el Mediterráneo hasta el Mar Rojo, helando los corazones de todos aquellos que lo escucharon. La arena resbaló en cascada por sus flancos cuando se volvió y saltó con gracia felina sobre la pirámide más cercana y desapareció en la calurosa bruma del Desierto del Sáhara.
http://www.edicionesefimeras.com/
Entrando súbitamente en un estado de completa vigilia, se alzó sobre sus patas con un aullido agónico que pudo oírse desde el Mediterráneo hasta el Mar Rojo, helando los corazones de todos aquellos que lo escucharon. La arena resbaló en cascada por sus flancos cuando se volvió y saltó con gracia felina sobre la pirámide más cercana y desapareció en la calurosa bruma del Desierto del Sáhara.
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1 comentario:
¡Qué bueno! Me encantó este doloroso despertar de la Esfinge...
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