MIL
Héctor Ranea
Más. Exijámonos un poco, ¡Che! Así habló el coordinador. Es como con los nombres de los dioses. Son desconocidos, son infinitos, así que hay que buscar. Nunca encontraremos todos los nombres, pero al menos lo intentamos, dijo alguien. Algo así, algo así. Busquen. Salimos como Lancelot a buscar el Grial. Algunos buscaron en sus arcones llenos y encontraron historias. Otros enviaron escenas que hallaban por el camino para dilucidar si eran lo buscado. Algunas llenaron las manos del coordinador de historias de papel y lápiz para saber si llegarían a los mil. Y él, que no paraba de encontrar imágenes adecuadas para ilustrar lo que llegaba, apenas llegaron los mil cuentos encontró el resultado de tanta sinergia. Y siguió sin descansar, en pos de los dos mil.
1 comentario:
¡Ya sé, ya sé! Borremos todo el archivo de imágenes de Google!!!
(y descansamos un ratito)
Pato
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