LEYENDA DE JOVAK
José Vicente Ortuño
Hubo un sabio llamado Jovak, que se propuso acabar con las miserias que afligían a la humanidad. Estudió los escritos de sabios y eruditos, pero no halló lo que buscaba. En busca inspiración espiritual se retiró entonces al desierto, donde meditó y ayunó sentado bajo una roca. Cuando creyó poseer la respuesta marchó a una aldea cercana y proclamó:
—¡Los males del mundo desaparecerán con la autocastración, pues evita las tentaciones carnales y la violencia que de ellas se deriva! —dicho esto se cortó los testículos y los colgó en el extremo de su báculo.
Muchos hombres desesperados y débiles mentales siguieron su ejemplo. Formaron una secta a la que llamaron los Testículos de Jovak y marcharon a predicar. Hasta que la falta de prosélitos y la esterilidad acabaron con ellos.
La humanidad mejoró, pues varios cientos de idiotas no dejaron descendencia.
Ilustración: M.C.Escher (Periodo Italiano 1922-1935)
Hubo un sabio llamado Jovak, que se propuso acabar con las miserias que afligían a la humanidad. Estudió los escritos de sabios y eruditos, pero no halló lo que buscaba. En busca inspiración espiritual se retiró entonces al desierto, donde meditó y ayunó sentado bajo una roca. Cuando creyó poseer la respuesta marchó a una aldea cercana y proclamó:
—¡Los males del mundo desaparecerán con la autocastración, pues evita las tentaciones carnales y la violencia que de ellas se deriva! —dicho esto se cortó los testículos y los colgó en el extremo de su báculo.
Muchos hombres desesperados y débiles mentales siguieron su ejemplo. Formaron una secta a la que llamaron los Testículos de Jovak y marcharon a predicar. Hasta que la falta de prosélitos y la esterilidad acabaron con ellos.
La humanidad mejoró, pues varios cientos de idiotas no dejaron descendencia.
Ilustración: M.C.Escher (Periodo Italiano 1922-1935)
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