viernes, 18 de julio de 2008

Despecho - Olga A. de Linares


DESPECHO
Olga A. de Linares

No podían permitir semejante afrenta.
Nunca un hombre, un insignificante y pretencioso hombre, se había negado a sus deseos.
Siempre les había bastado abrir la boca para que ellos tuvieran en mente una sola cosa: entregárseles, gustosa y fatalmente. Sin excepciones. Hasta aquel día.
Anticipando su triunfo, se regocijaron al verlo aproximarse.
Pero... ¡qué amargura cuando se alejó, haciendo oídos sordos a sus reclamos!
Tomaron buena nota de su aspecto, su rostro astuto les quedó grabado a fuego. Apelando a las antipatías que había sabido despertar en algunos dioses, supieron cuál sería su camino de regreso. Él, claro, no podía adivinar que lo interceptarían.
Y esta vez no estaría atado.
Esta vez sería incapaz de resistir su canto.
Esta vez, ellas cambiarían la historia.

1 comentario:

aleksliterat dijo...

Está excelente, profundo, aunque un poco débil el final, me lo imaginé con más ímpetu.