REALIDAD
Edgar Omar Avilés
Deprimido ante la realidad, se apuntó a la cabeza con sus dedos lápices como pistola: se suicidaba aquel que cabalgando a lomo de libro combatió al dragón devorador de los sueños de sus días; se suicidaba aquél que con las estrellas como engranes logró que la maquinaria de su universo funcionara. ¡Pum!, y su cabeza explotó, y los seres que vivían en ella se traspasaron al mundo, y él se convirtió en la realidad.
1 comentario:
Interesanta. Muy Bueno Omar.
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