LA COSA INVISIBLE
Lorena Venta
Ella lo mordió. Él abrió los ojos. Gritó. Inmóvil resistió cada uno de los mordiscos invisibles. Ella se tragó su pie derecho, luego el otro, llegó hasta sus piernas. Trituró su cintura. Él siguió vivo hasta que Ella se comió su corazón…
Esa noche, Ella regresó a su guarida en las montañas y vomitó otras tres cosas que morderán a otros tres hombres.
2 comentarios:
Perturbador. Interesante.
Repito lo que dice el comentario anterior, y añadiría: bastante terrorífico... nada asusta más que lo invisible.
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