UNA VOZ TRAS ÉL
Fredric Brown
Cuentan una deliciosa historieta de horror sobre un labriego que se adentró en un bosque encantado; según la gente, lo habitaban demonios que se llevaban consigo a cualquier mortal que osara entrar en él. Pero, mientras caminaba por el mismo con paso lento, el labriego pensaba:
—Soy un buen hombre que nada malo he hecho. Si los demonios pueden hacerme algún daño es que no existe ninguna clase de justicia.
Y en ese momento se oyó una voz que decía tras él:
—No existe.
1 comentario:
Aplausos para este cuento.
Pero se llamaba Fredric, no FredEric.
http://en.wikipedia.org/
wiki/Fredric_Brown
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